Iluminación zen: cómo conseguir una buena iluminación Feng Shui
La mayoría de personas piensan que el Feng Shui es una técnica antigua china que consiste en la reordenación del mobiliario para aprovechar el máximo espacio, pero es mucho más que eso. El Feng Shui es el arte de cómo afecta el entorno a tu estado anímico. Un buen Feng Shui hace que te sientas seguro y cómodo en tu espacio, permitiéndote vivir una vida más feliz y libre de estrés. Los efectos positivos de esta técnica incluye la creación de energía positiva para la salud, la economía, los romances, la armonía en relaciones problemáticas, etc. Pero, ¿cómo se puede relacionar la iluminación con este antiguo arte? A continuación, te damos algunos consejos sobre cómo iluminar tus espacios mediante esta técnica.
Índice:
La importancia de la iluminación en el Feng Shui
El objetivo del Feng Shui, como ya hemos mencionado anteriormente, es equilibrar la energía de tu entorno. Esto puede lograrse de distintas formas, desde aumentar o disminuir el tamaño de los objetos que se encuentren en tu estancia, así como cambiar la dirección en la que están orientadas dichos objetos. Sin embargo, otra forma sencilla de gestionar dicha energía es cambiando la iluminación consiguiendo de esta forma obtener, también, una iluminación zen.
Un buen uso de la iluminación es esencial para que tu casa consiga un buen Feng Shui. La luz representa al fuego, uno de los cinco elementos que aportan armonía y equilibrio a cada espacio. Además, una buena iluminación también equilibra la oscuridad de la energía Yin (energía íntima, fría y tranquila simbolizada por la luna y por la noche) con el brillo de la energía Yang (energía viva simbolizada por el sol y el día) según lo requiera cada espacio. Siendo una mala iluminación un factor clave en la acumulación de desorden, lo que hace que se ralentice la entrada de energía chi (energía o el principio activo que nos da la vida, la energía vital que une cuerpo, mente y espíritu) en la estancia.
Lo más importante es que el Feng Shui está relacionado con la energía y, dado que la luz es la manifestación más fuerte de la energía, la iluminación de su hogar tiene una influencia dominante en la calidad de su chi. Los expertos están de acuerdo en que una iluminación inteligente, junto con un aire de buena calidad, son los fundamentos del Feng Shui y deberían estar siempre a la cabeza de tus prioridades para cualquier espacio, ya sea el hogar o el negocio.
Cómo equilibrar la luz en tu espacio
1. Identifica los problemas de iluminación.
Una iluminación deficiente puede afectar a tu estado de ánimo y, en general, a tu bienestar. El buen Feng Shui requiere equilibrio, pero estos efectos negativos son el resultado de un desequilibrio de la iluminación. Algunos de los problemas que hay que tener en cuenta son la creación de sombras, la falta de iluminación vertical en las paredes y la iluminación con un bajo índice de reproducción cromática (IRC). Estos problemas pueden solucionarse añadiendo focos downlight LED o apliques de pared con un alto IRC.
2. Aprovecha la luz solar y su energía positiva.
La luz emitida por el sol es la mayor fuente de energía luminosa y, por lo tanto, es crucial para mantener una energía chi equilibrada en los hogares, estudios y oficinas. Presta atención a la cantidad de luz solar que disfrutas a lo largo del día, así como a la calidad y al número de luminarias interiores que tienes en casa u oficina. Siempre que puedas, utiliza ventanas o tragaluces para iluminar tus espacios, aprovechando de manera más óptima la luz solar. Si la luz natural no es completa, puedes mezclarla con luminarias que proyecten una luz homogénea.
3. Aprovecha la energía que transmite el uso de colores en las estancias.
Las luces con un IRC bajo dificultan la diferenciación de colores, como pueden ser el azul marino y el negro. Existen diversos colores que aportan más energía lumínica a tus espacios y que contribuyen a un uso más eficaz de la luz.
4. Utiliza luces de tonos cálidos en espacios dedicados al descanso.
La iluminación adecuada es muy importante para la función que va a desarrollar una habitación en el hogar. La luz con una temperatura de color más cálida (por debajo de 3000K), crea un ambiente más relajado y confortable, mientras que la luz con una temperatura de color más fría (por encima de 3000K), crea un ambiente más enérgico. Por ello, es aconsejable utilizar una iluminación de tonos cálidos en las habitaciones dedicadas al descanso y una iluminación de tonos fríos en las zonas más activas. Esto ayudará a mantener unos niveles de chi armoniosos en tu hogar. No obstante, puedes utilizar lámparas de techo cuya temperatura de color es regulable, de esta forma podrás ajustar la iluminación de una misma estancia en función de lo que requiera cada situación.
Realizando estos sencillos cambios en la iluminación de tu hogar u oficina, conseguirás disfrutar de un espacio bien equilibrado y de la multitud de beneficios que aporta el Feng Shui.
Nos interesa tu opinión
¿Qué opinas del Feng Shui? ¿Qué habitaciones de tu hogar crees que podrían adecuarse a este concepto de iluminación? ¡Déjanos un comentario y cuéntanos!
Comentario (1)
Excelente post, claro y conciso. Como empresa de reformas, valoramos la importancia de crear espacios que no solo sean visualmente atractivos, sino que también promuevan la armonía y la energía positiva. Este artículo sobre iluminación y Feng Shui resalta cómo una adecuada planificación lumínica puede marcar la diferencia en la calidad de vida en tu hogar.
Creemos que temáticas como estas deberían de ser de obligado conocimiento para todo profesional que se tercie en reformas y adaptabilidad del hogar, desde luego sería un valor añadido al cliente. Saludos.